martes, 8 de noviembre de 2005

"...no tendré miedo..."

Vamos a conjurar a la muerte esta noche. Pidámosle que se aparte.

Calladamente porque no puedes saber que lo sé, te pongo en mis oraciones. También he llorado. He llorado porque mi pequeña amistad no puede salvarte de la soledad que te atormenta dentro de tu cuerpo amenazado.

Compasión es compartir el dolor -y así estás rodeado de quienes más te aman-, pero te enfrentas solo a la muerte sin saber si pasará de largo, y sé que no hay compasión alguna que pueda aliviar ni tu dolor ni tus más íntimos temores.

Tú no lo sabes, pero mis pensamientos y mis oraciones vuelan hacia ti y, si Dios escucha mis humildes plegarias, el miedo pasará.

Vamos a conjurar al miedo esta noche.
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