Quisiera decirte...

Quisiera decirte....
Quisiera decirte pero no puedo.
No se supone que yo esté enterada del trance que atravesarás.

Quisiera decirte...
Quisiera decirte que has tocado mi vida y la de otros compañeros de alguna manera.
Quisiera decirte que te considero mi amigo y que quiero verte pronto.
Que quisiera poder cargar gustosa con tu angustia para que enfrentes el bisturí con arrojo.

Quisiera decirte pero no puedo.
Desde que lo supe no he dejado de conjurar al miedo en mis rezos para que en el quirófano, tranquilo, te entregues al sueño y tengas un buen despertar.

Quisiera decirte, amigo, las palabras perfectas que te dieran serenidad.
Pero no hay palabras perfectas, mucho menos siquiera correctas.

Quisiera decirte... y tengo que callar.

Así, en la obscuridad de esta noche de víspera, quiero creer que estos mis rezos velan tu sueño mientras esperas... como si de algo realmente pudiera servirte mi amistad.
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