Me salió una chachalaca muerta en mis cheetos!

Pues la última de el Peje es acusar a los empresarios mexicanos de un "compló" en su contra que involucra mensajes subliminales.

Ahora resulta que el Peje hubiera ganado por una amplia diferencia si no hubiera perdido a sus seguidores de mente débil ante una sucia campaña de los empresarios mexicanos que se habrían gastado más de $300,000,000 en un bombardeo de publicidad subliminal.

Lo extraño es que, si creemos esto, a su lado se quedó solamente la gente lista (sí, claro).
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